Los desastres ambientales que está experimentando
el planeta en los últimos tiempos, han sido originados gracias al desequilibrio
del ser humano. Debido a esto, se considera muy importante la Educación
Familiar, que según los expertos inicia desde el vientre materno. Aquí se
presentan algunas recomendaciones para que la futura madre lleve un embarazo
equilibrado.
· Una mujer embarazada debe cuidarse mucho y tener
una dieta equilibrada. Cometer errores de nutrición durante el embarazo
no sólo le roba al bebé los nutrientes, sino que deteriora la salud de la madre
a corto y a largo plazo. Para el desayuno te recomendamos frutas y oleaginosas
(maní, merey, pistacho, otros); para el almuerzo leguminosas (granos), ensalada
de vegetales verdes (lechuga, espinaca, cilantro, otros) y no verdes (coliflor,
papa, zanahoria, otros), brotes de alfalfa, champiñones o carnes blancas; para
la cena cereales integrales (arroz, maíz, trigo) combinado con otros
ingredientes integrales de tu preferencia.
· No te excedas en las comidas. Evita que las mismas te
sienten mal y que engordes más de lo necesario. No consumas grasas, frituras,
enlatados, embutidos, comidas rápidas, golosinas, bebidas alcohólicas,
gaseosas, café y jugos de sobres, ya que estos le roban a tu organismo las
vitaminas, los minerales y los oligoelementos que tu cuerpo necesita para
producir las defensas contra virus y otras enfermedades. Elige el agua natural,
el agua de coco, el jugo de caña o los jugos naturales (endulzados
preferiblemente con panela o miel).
· El embarazo es el momento ideal para comenzar un
programa de ejercicios. Hacer ejercicios moderados durante el embarazo te
mantendrá en forma y con flexibilidad, te facilitará el trabajo de parto,
ayudará a mantener tu peso bajo control, y además mejorará tu postura
aliviándote molestias.
· La educación comienza antes del nacimiento. La unión entre la madre y el hijo no es
sólo física, sino también es mental, emocional y espiritual. Todo lo que la
madre ve, oye o siente, lo está percibiendo el bebé de forma indirecta. Se
recomienda leerle algunos libros al bebé (que contengan la enseñanza que los padres
quieren para él), colocarle música selecta (instrumental), acariciarlo y sobre
todo comunicarse con él en todo momento.
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